Medicina interna
La medicina interna es una especialidad de la medicina veterinaria que abarca el tratamiento de patologías que afectan a los órganos y sistemas internos del animal. Abarca una atención integral del animal, así como el diagnóstico y tratamiento no quirúrgico de numerosas patologías. Esta rama se caracteriza porque brindar una visión global del animal enfermo.
Un veterinario internista no trata solamente signos clínicos o enfermedades, sino la unión de todo ello. Evalúan todas las pruebas diagnósticas, se deciden si son necesarias más y se elabora una lista de diagnósticos diferenciales que llevarán a un diagnóstico y a un tratamiento.
Es decir, tratan enfermedades complejas de los distintos sistemas orgánicos (respiratorio, urinario, cardiovascular, gastrointestinal…) y como interactúan entre sí como un conjunto.
El internista veterinario plantea además de las pruebas básicas de laboratorio, técnicas no invasivas tales como endoscopia digestiva, broncoscopia, lavados broncoalveolares, tomas de biopsias…
La cooperación entre los veterinarios generalistas, los internistas y demás especialistas es vital para obtener una visión integral de lo que está sucediendo al paciente.
¿Qué diferencia hay entre un veterinario generalista y uno internista?
Un veterinario generalista, aunque frecuentemente se confunda, no es un veterinario internista. El primero trata las enfermedades que no requieren ser enviadas a un especialista concreto, brindando una atención primaria, mientras que el internista es un especialista dentro de la medicina veterinaria que explora de forma más profunda casos más complejos.